27 de março de 2008

Galleguismo vasco (segunda parte)

Y es que está es, en realidad, la primera parte y creo que yo que definitiva. El PNV apostó por una campaña electoral para las generales en la que se les llenaba la boca de referendos, de que el pueblo vasco tiene derecho a decidir su futuro, y asuntos del estilo. Pero, llega el día 9 de marzo, las diez y media de la noche, aparcen los datos casi definitivos y le dan victorioso al PSOE en las tres provincias de Euskadi (Bizkaia, Gipuzkoa y Araba). Lo de Gipuzkoa y Araba ya se había repetido en las municipales con la victoria en Donosti y Vitoria-Gasteiz, pero lo que llamó la atención fue la victoria del PSOEismo en Bizkaia, esa eterna peneuvista. Hasta aquí todo bien.
El PSOE, después de no llegar a la mayoría absoluta como esperaba, (Menos mal) decide buscar socios de gobierno. Lo de CiU se ve, en principio, algo más complicado, sin embargo no hay que olvidar que el PSOE es capaz de pactar hasta con la muerte. El PSC no apoyaría eso, pero vete tú a saber. El PNV y su enviado especial en Madrid, Iñaki Urkullu, entran en escena. El vasco quiere pactar a toda costa con el PSOE y formar gobierno, y le importa un pito lo que diga su coleguilla Ibarretxe, que sigue en sus trece de crear un Estado de libre adhesión y que los vascos
voten en un referéndum qué coño quieren hacer.















Galleguismo vasco: Lo que antes valía, ahora ya no vale. Por favor, definíos. Este post breve, pero conciso intenta explicar el galleguismo peneuvista, que es capaz de defender un referéndum a la vez que quiere pactar con el PSOE, que le niega poder hacerlo,. Viva la demagogia. Todos quieren coger su cacho de pastel y más ahora que perdieron fieles en las tres provincias vascas. En las próximas elecciones autonómicas de Euskadi, ¿Veremos a un tal señor López de Lehendakari? ¿Lo permitirán los vascos RHacheros? ¿Qué es el PNV? ¿Es vasquista o galleguista?. Éstas y otras más preguntas me vienen a la cabeza tras observar durante varios años a un partido disfrazado de nacionalista majete, para muchos, cuando de verdad se trata de un nido de derechosos facciosos, sumisos y bajados de pantalones (todos recordamos el pacto de Santoña). Envueltos en ikurriñas, que queda mejor (no te jode).

1 comentário:

lutxo disse...

Personalmente, siempre he pensado que el galleguismo del PNV ha sido clave para mantener al partido en la lehendakaritza. En Euskadi, representar el centro político en lo relativo al "conflicto" (esto es, ni ser abertzale ni españolista al cien por cien o no serlo en todo momento)asegura el apoyo de la mayor parte de los votantes no adscritos a unas siglas. El PNV puede firmar Ajuria Enea o Lizarra una década más tarde, según valoren sus dirigentes que se encuentra el centro político en el conflicto. No puedo decir realmente si hay una convicción de centrismo o si el PNV se mueve por arrebatos electoralistas (más bien me decantaría por lo segundo), pero a los jeltzales les ha valido con esta estrategia de ambigüedad para mantener un electorado fiel. Además de otras cosas que ahora no vienen a cuento.

Creo que el reciente triunfo del PSOE en las elecciones generales (como el triunfo previo del PSE en las alcaldías de Donosti, que ya tenía, y Gasteiz) viene motivado por la postura, también galleguista, de Zapatero en lo referente al conflicto ETA - Estado. No es que ZP siga el juego del PNV; pero sí creo que una parte de los votantes vascos (que no la sociedad vasca, tiene poco que ver una cosa con la otra) ha visto en ZP voluntad de diálogo por un lado y rechazo de la violencia por otro. Esta percepción puede haber situado al PSOE en ese centro político relativo al conflicto, donde el PNV lleva comodamente asentado durante varias décadas.

Con Imaz autodefenestrado por un lado, Urkullu presidiendo el partido e Ibarretxe con su plan se queda en anécdota de batzoki; veo al PNV un poco perdido. Y me pregunto qué puede pasar en las siguientes elecciones al Gobierno Vasco. Evidentemente, hasta entonces el camino va estar lleno de trampas: más atentados (alguno que pretenderá ser mortal, me temo), el dilema de la ilegalización de la izquierda abertzale, los pactos antiterroristas que se lleven a cabo en madrid, los juicios a gestoras y el 18/98... Si el PSE mantiene el tipo, ¿tiene Patxi López oportunidades de ganar más terreno al próximo candidato del PNV a lehendakari (si el plan Ibarretxe no sigue adelante, dudo que Juanjo renueve candidatura)?

No sé, no sé... No sé nada... Uno habla de estas cosas y da la sensación de que sólo conviene galleguizar. El tema, de todas formas, es interesantísimo. Y lo que está por venir, me temo que va a requerir de toda nuestra atención.

Un abrazo, txulo!!